De la entrevista que concedió el congresista Jorge del Castillo al diario El Comercio (25 de enero de este año) se pueden extraer cosas interesantes sobre la movidas políticas dentro del partido de la estrella. Hace más de una semana, cuando Del Castillo manifestó su intención de postular a la presidencia, el presidente Alan García dio un fuerte espaldarazo al alcalde de Lima, Luis Castañeda Lossio, quien encabeza las preferencias electorales. El gesto del mandatario fue interpretado como un rechazo hacia la precandidatura del ex primer ministro.
Alan García tiene varias razones para oponerse a la designación de Del Castillo, entre las que destaca su negativa a compartir el poder dentro del Apra. García no quiere que otras figuras acaben con el monopolio que ostenta desde que condujo al Partido Aprista al poder. Si a mediados de los ochenta competía con personalidades de la talla de Luis Alberto Sánchez, Armado Villanueva del Campo, etc., desde los noventa no existen contrapesos claros en la toma de decisiones.
Su larga ausencia durante la última década del siglo pasado -exilio dorado en Bogotá y Paris- alimentó las esperanzas de nuevos liderazgos pero esto no ha ocurrido. En esa época se pensaba en la posibilidad de revitalizar al Partido Aprista sin García, ya que había realizado uno de los peores gobiernos de la historia. Muchos apristas no querían cargar con el enorme pasivo de su gestión; pero ni bien regresó al país asumió las riendas del partido y participó en las elecciones de 2001 (cabe destacar que en ese período García controlaba al Apra por medio del corrupto Carlos Mantilla, ex secretario general de la organización).
Del Castillo debería ser el delfín natural de García a pesar de que ha sido involucrado en el escándalo de los 'petroaudios', que originó su renuncia al Gabinete a fines de 2008. Lo que nos hace pensar que Del Castillo postulará, con o sin la venia de García, es su intento por limpiar su imagen. En diversos programas periodísticos ha solicitado a la Fiscal de la Nación, Gloria Echaíz, que le permita participar en el proceso penal y ha criticado, con sólidos argumentos doctrinarios, la anulación de los audios por parte del juez César Barreto como material probatorio.
El ex secretario general del Apra sostiene que la 'Teoría de la Ponderación' le permite a los magistrados reconocer la validez de pruebas obtenidas de maneria ilegal porque el interés público (conocer los alcances de la participación de los implicados en un proceso de corrupción), prima sobre el interés individual (la violación de las comunicaciones que sufrieron el lobista Rómulo León Alegría y compañía).
La dirigencia del Apra piensa anunciar en marzo a sus candidatos a la presidencia, las alcaldías y gobiernos regionales. No se espera que obtenga buenos resultados a nivel nacional, regional ni local pues compite con muchas fuerzas políticas. Sin embargo, la necesidad de no perder escaños en el Parlamento lo obliga presentar a su mejor candidato, en este caso, a Del Castillo, quien ha tenido éxito en el pasado en lides electorales pues ocupó la Alcaldia de Lima entre 1986 y 1989.
Ganar en el 2011 parece improbable sin García, aun cuando el Apra no haya repetido los errores de su primer gobierno y pueda exhibir algunos logros en materia económica (reducción de la pobreza monetaria y crecimiento del PBI), además de contrarrestar parte de los efectos de la crisis financiera mundial. Entre los voceados para suceder a García se encuentran, además del propio Del Castillo, Javier Velásquez Quesquén, actual primer ministro, y la ministra de la Mujer y Desarrollo Social, Nidia Vílchez.
En los últimos meses se rumorea que el Apra establecería alianzas con grupos afines como el Partido Humanista, que lidera el ex premier Yehude Simon, y con el movimiento Renovación de Rafael Rey, titular de la cartera de Defensa. Sin la amenaza del humalismo no le vemos mayores oportunidades en la próxima contienda electoral pues compite con un pull partidos de centroderecha.
Por si fuera poco, cuando el Apra triunfó ajustadamente en el 2006, dejó de ser el partido que representa a los trabajadores y clases medias para asumir la defensa de los intereses de la Confiep (Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas). Ese giro, que ya se había producido antes cuando Haya de la Torre pacta con el Pradismo en 1963, y que García renueva posteriormente con la élite empresarial entre 1985-1987, enajena al Apra de su histórica base social.
Hoy en día los destinatarios del discurso aprista se hallan en los pueblos jóvenes y distritos periféricos de las ciudades; pero han sido captados por Castañeda Lossio, en el caso de los conos de la capital, y por Keiko Fujimori, cuyo padre, el ex presidente y reo Alberto Fujimori, masificó el clientelismo político (el reparto de víveres, ropa donada y útiles escolares) en las comunidades y caseríos más alejados para conseguir votos.
Para terminar, Del Castillo debe aclarar su relación con el empresario dominicano Fortunato Canaán, quien contrató los servicios del procesado Rómulo León Alegría, ex diputado y ministro aprista, para obtener ventajas en procesos de licitación. Si bien Del Castillo fue absuelto en los informes de la comisión que investigó el caso de los 'petroaudios', de nada le sirve sus conclusiones pues el Congreso no tiene credibilidad ante la opinión pública.
0 comentarios:
Publicar un comentario